PESCA EN EL RÍO BERMEJO

LA SENSACIÓN QUE TE DEVUELVE EL PIQUE ...

 

LOS ATAQUES DEL TEMIBLE "PEZ PERRO"...

Alertados por los constantes reclamos de los pobladores de Orán - Salta, debido a que habían sufrido múltiples ataques del temible "Pez Perro", una comisión del Panter´s Team, se desplazó a esas norteñas tierras para tratar de desentrañar el misterio... Una vez más el equipo contó con la presencia estelar de Rafa Suárez como "Encargado Mayor de la Pesquiza" (no de la Pesca), y también con la participación de reconocidos pescadores del norte como Martín Delgadillo y Pablo Escobar -entrenados por el Sordo Rivera por supuesto-, asimismo, y ya en la ciudad de Orán, se sumó nuestro Guía, el afamado "Chamán" Armoa quien fue contactado a su vez por un gran amigo nuestro El Tigre Sutara, al que desde ya le va nuestro agradecimiento... La naturaleza una vez más nos dió un cachetazo ya que nos recibió con 43°C al llegar a dicha ciudad del Norte de Salta, en las calientes arenas del río, sin sombra siquiera, la temperatura trepó a 45°C, también fué llamativo la cantidad de vehiculos que se quedaron agarrados por la arena suelta de la playa aledaña al río, y nosotros no fuimos la excepción... gracias a la pericia  de Pablo que nos tiró la soga pudimos zafar del momento; Así, llegamos hasta la mismísima orilla del río y logramos bajar los pertrechos para armar un sacho-campamento en la arena, pudimos levantar una pared-techo para protegernos del sol... allí quedó una comitiva integrada por Pablo y Rafa que intentaron pescar algo desde la orilla sin mucha suerte por cierto y otra comitiva se desplazó en una chalana de madera para una isla (islita diminuta, realmente) en donde tendríamos inmejorable ubicación para dar caza a ese temible depredador de la zona, que según los moradores de allí se comía vivos hasta zorros, nutrias y carpinchos... ya no había vuelta atrás, el deber llamaba... así las cosas Martín Delgadillo comenzó a hacer la punta, ya que clavó una docena de bagres de buen porte en dicho recodo del río, los piques de los Robales también nos despertaron la sorpresa, pero no se pudo dar con las capturas de robales ya que cortaron múltiples veces la tanza y los braids por su fuerza y fiereza cuando se ven clavados para meterse en la tosca y lajas del fondo del río... infinidad de veces hicieron reventar la línea... y ya al final del día, entrada la tarde noche se dió el pique del temible "Pez Perro", así llamado por los lugareños, quien relata primero y Martín Delgadillo después logramos clavar un par de ejemplares, evidentemente habíamos dado con el cardumen o la jauría -aún no sabemos-, en fín, el misterio comenzaba a esclarecerse, se trataba de los renombrados chafalotes, peces de aspecto realmente temible por la dentadura potente y los colmillos incisivos como de perros salvajes. Debemos acotar que el Río Bermejo se presentaba con las aguas muy bajas acorde con la época, aguas claras, el paisaje brutalmente tosco con vegetación quemada por el fuerte invierno de la temporada, y el calor insoportable que nos empujó a hidratarnos con fernet, cerveza, tetras, y cuanto líquido estuviera a nuestro alcance, en muchas ocasiones tuvimos que meternos de cabeza al río, y disfrutar de las aguas como si estuvieramos en Punta Cana...; A pesar de que armamos la carpa, por el calor contínuo de la noche, dormimos a la intemperie, al costado de la misma...; En cuanto a las técnicas de pesca diremos que intentamos con artificiales de profundidad dar también con surubíes y dorados pero los esfuerzos fueron en vano, al final no le pudimos conocer la cara al surubí ni al robal, también casteamos al choque para ver si se interesaban los sábalos, y nada... pero la satisfacción del deber cumplido hizo que valoremos las capturas de chafalotes para dejar tranquilos a los lugareños y sobre todo a los animalitos de ese paraje que ahora sí podrán tranquilamente acercarse al río sin temores...Ah, un misterio más se presentó al recorrer el zigzagueante cauce del río, ya que en uno de los pozos aparece en el peñon un pilote de cemento que no tiene nada que hacer allí, y que es un objeto extraño en el paisaje (como se ve en las fotos), la verdad, que ese misterio del pilote de cemento no pudo ser descifrado por nuestro equipo... En las fotos se aprecia a Rafa, cual pescador  Categoría "A", castear en el río como un verdadero profesional, también un lugareño poniendo trampas en el río para atrapar algún bagre, boga o dorado, los distintos paisajes que integran ese maravilloso conjunto de tierra-agua del Bermejo en las cercanías de Orán... debemos dar crédito especial a los hermanos de Chamán Armoa que compartieron campamento con nosotros y que por la noche nos hicieron un estofado de cordero al tomate en una gran paila que estuvo para chuparse los diez dedos de la mano, también asaron cordero a la parrilla para deleite de todos los campamentistas, bien regado por cierto... de este modo la buena gastronomía no nos abandonó, como siempre fiel compañera....